Los actuales ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) enfrentan una encrucijada: heredar a la próxima integración los casos sobre prisión preventiva oficiosa y arraigo, o emitir un fallo histórico que dé cumplimiento a la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coridh) en el caso García Rodríguez y otro vs México, plantea Aribel García, abogada y cofundadora del colectivo Pena Sin Culpa.

La Corte también tiene pendiente resolver el amparo directo promovido por Daniel García Rodríguez, quien busca anular la sentencia de 35 años de prisión que se le dictó por diversos delitos, principalmente el homicidio calificado de la regidora de Atizapán María de los Ángeles Tamés, cometido el 5 de septiembre de 2001.

Daniel García fue acusado de la autoría intelectual, permaneció más de 40 días en arraigo y luego más de 17 años en prisión preventiva oficiosa. Esta situación derivó en la sentencia de la Coridh, que declaró inconvencionales ambas figuras en el contexto del caso.

Actualmente, en la SCJN ya está listo el proyecto del ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo, que responde a la resolución del tribunal internacional emitida el 25 de enero de 2023. Sin embargo, su discusión ha sido pospuesta en reiteradas ocasiones. Hasta este jueves, el caso figuraba en el lugar 20 de la lista del pleno, con apenas seis sesiones públicas restantes antes de la renovación de la Corte el próximo primero de septiembre.

Todavía tengo la esperanza de que lo discutan. Es una oportunidad histórica que los actuales ministros no deberían desaprovechar... Sería cerrar con broche de oro, con una resolución que realmente impacte la vida de miles de personas, expuso a La Jornada Aribel García, hija de Daniel García, quien durante años también encabezó su defensa legal.

Yo lo platicaba con mi papá cada semana cuando lo visitaba en prisión. Llegó un momento en que entendimos que esto ya nos había rebasado. Ya no era sólo por nosotros. Había miles de personas más. Conocimos muchos casos peores en la cárcel, relató.

Desde agosto de 2019, Daniel García se encuentra en libertad mientras combate legalmente la condena. Aunque el proceso ha sido largo y desgastante, su hija afirma que ambos han encontrado un propósito mayor: la defensa de los derechos humanos.

Ahora esperan que la SCJN resuelva los dos asuntos pendientes, como pasos para limpiar el apellido y cerrar definitivamente esta etapa.

Esperamos la resolución del amparo directo. Al final, ya cumplió. Si fuera un caso común, con preliberación ya habría salido. Pero aquí, más bien, la justicia le quedó a deber, concluyó Aribel.